jueves, 28 de agosto de 2008

SOL...

Despierto con el cielo ardiendo en mi cabeza (este sol mentiroso de invierno) y mi mano marcada en la mejilla izquierda…
En mis dedos hormiguea un calambre, la sangre que se acostumbró a huir, dibuja un hilo desde mi nariz, hasta el mentón… y retrata rosas rojas en el cuaderno donde solía escribirte y que hoy sólo re-leo cada atardecer, meciéndome en esta banca.
Me pierdo en cada una de las letras que pinte para ti… calibrando cuanto quise contener en cada palabra, me pierdo y sueño otra vez con millones de letras que me llevaron a ti, con el sol calentando mis huesos y achicharrando mi cabeza…

1 comentario:

Anónimo dijo...

No quiero volver a escribirle a alguien.. sé que no lo haré en un tiempo, porque al final esas letras con las que me carcomen con los detalles alrededor del papel.

Quiero dejar de hacer muchas cosas, escapar de mucho.. y dejarlo de lado.

Hace poco me di cuenta que no me gusta recordar, asi que voy a dejar de releer, así que voy a dejar de ser; por un tiempo.

Solo nos queda soñar, sueña ale.
SUEÑA, ahí tu eres la dueña.